Les voy a hablar de uno de los mejores jugadores, de la historia de los Países Bajos. El gran Faas Wilkes.
Servaas (mas conocido como Faas) Wilkes fue un futbolista neerlandés, de los años 40, 50 y 60. Jugaba como delantero, actuando como nueve, pero con total libertad. Vamos, que su posición ideal era como segundo punta. Su mayor cualidad era el dribbling. Podía regatear a todo el equipo contrario, con una facilidad asombrosa. Es mas, si se lo hubiera propuesto, podría haber regateado dos veces a los mismos rivales, porque era puro espectáculo y lo hacía con una habilidad que parecía de otra galaxia, dejando tirados en el suelo a los contrarios, incapaces de defenderle. Era diestro, pero manejaba muy bien la pierna izquierda. No solo vivía del regate, sino que se asociaba de maravilla con los compañeros y podía dar grandes asistencias y centros, ya que al jugar con total libertad, aparecía por el centro y por las bandas. A parte de todo lo mencionado anteriormente, también tenía gol. Y su físico era peculiar porque medía 1,90 y era un palillo, pero tenía una gran velocidad y arrancada. Un jugador extraordinario.
Empezaría su carrera en su país, en el Xerxes en 1945. En el conjunto de Rotterdam jugaría cuatro temporadas a un nivel sensacional, convirtiéndose en la gran estrella de los Países Bajos y llamando la atención de toda Europa. Quién se haría con sus servicios, sería el Inter de Milán en 1949. En el conjunto neroazzurro jugaría tres temporadas grandiosas, convirtiéndose en uno de los mejores delanteros de Europa. Sería uno de los goleadores de la Serie A, aunque por debajo de monstruos como Nordhal. No ganaría ningún título, pero andaría cerca. Compartiría equipo con Skoglund. En 1952 cambia de equipo y ficha por el Torino. En el Toro tuvo mala suerte, ya que se perdió casi toda su primera temporada, por culpa de una grave lesión. En un partido amistoso jugado con el Valencia en el verano de 1953, el presidente de la Federación Valenciana de fútbol, preguntó a los directivos del Torino, a ver cuantos camiones de naranjas hacían falta, para pagar el fichaje del astro neerlandés. Y los directivos se lo tomaron en serio y pusieron un precio, entonces la directiva valencianista entró a negociar su fichaje, llegando a un acuerdo todas las partes y firmando el contrato que le unía al Valencia. Llegaba con el cartel de mediático, a una liga que contaba con grandes estrellas extranjeras, como Di Stéfano y Kubala. Rápidamente se convirtió en la gran estrella del conjunto ché. En el conjunto valencianista jugaba el capitán e ídolo Puchades. En su primera temporada sería el máximo goleador y ayudaría a los chés a ganar la Copa del Generalísimo de 1954. A parte de encandilar con su fútbol, no solo a la afición valenciana, sino a toda España. Pero en las dos siguientes temporadas bajó muchísimo su nivel, una por lesiones y otra porque enfermó de bocio. Wilkes pidió ser operado en los Países Bajos y también rescindir el contrato. El Valencia aceptó.
Wilkes con la camiseta del Inter de Milán
Wilkes con la camiseta del Valencia
Wilkes con la camiseta del Valencia
Libre de contrato y recuperado ya del bocio, firmaría por el Venlo en 1956. Con el conjunto neerlandés jugaría dos buenas temporadas. en las que recuperaría la brillantez y el gol. Pero echaba de menos Valencia, una tierra que le había acogido de maravilla y en la que se sentía como en casa. Así que volvería a Valencia, pero no para jugar en el Valencia, porque ya tenía 34 años. Ficharía por el Levante en 1958, que por aquel entonces se encontraba en la Segunda División. Jugó una gran temporada, pero el equipo no ascendería y retornaría a los Países Bajos, para fichar por el Fortuna 54 en 1959. Allí jugaría tres temporadas, para luego volver al equipo en el que comenzó su carrera, el Xerxes, con el que ficharía en 1962, para jugar dos temporadas y retirarse del fútbol en 1964, a la edad de 38 años.
Con la selección de los Países Bajos jugaría 38 partidos, pero todavía quedaban bastantes años, para que llegara la época gloriosa del fútbol neerlandés.
Faas Wilkes fue la primera gran estrella del fútbol neerlandés. Luego vendrían los Cruijff, Neeskens, Gullit, Van Basten, etc. Pero antes de que existiera la Naranja Mecánica, este delantero maravilló en Europa y es muy recordado, tanto por interistas como por valencianistas. Además su forma extrovertida de ser, caló muy hondo tanto en Italia, como en España. Un futbolista extraordinario, que es claramente uno de los grandes mitos del fútbol "oranje" y también debería estar en la lista, como uno de los mejores regateadores de la historia del fútbol.
No hay comentarios:
Publicar un comentario