Les voy a hablar de uno de los mejores jugadores de la historia de Suecia, Lennart Skoglund.
Skoglund fue un futbolista sueco de finales de los años 40, la década de los 50 y los 60. Jugaba de extremo izquierdo, pegado a la cal, pero de vez en cuando también se movía para el centro o para la banda derecha, para asociarse con sus compañeros o escapar del marcaje del rival. Era un driblador nato, regateando a cualquier rival que se le pusiera por delante. Tenía un talento extraordinario para el dribbling, pudiendo dejar tirado al contrario, ya que hacía unos quiebros espectaculares, yéndose hacia el exterior o el interior, convirtiéndolo en imparable. Además tenía mucha clase para llevar la pelota pegada al pie y para realizar centros desde la banda o dar asistencias. También era el encargado de realizar los saques de esquina. No solo era electricidad en el regate, sino que también le daba pausa al juego. Un jugador extraordinario, que era puro espectáculo en el campo, siendo uno de los mejores extremos izquierdos de su época, pero que no supo llevar una vida reposada y tranquila, esenciales en el deporte. Era extrovertido y risueño, es decir, lo contrario a los nórdicos, que por lo general suelen ser serios y reservados. Le encantaba salir de juerga y lo hacía continuamente, llegando a tener graves problemas de alcoholismo, que mermaron su rendimiento y que le llevaron a la autodestrucción, acabando de la peor manera posible. Vamos con su historia.
Lennart Skoglund nacido en 1929, obviamente vivió la Segunda Guerra Mundial, pero desde la distancia, ya que Suecia fue territorio neutral, con lo cual gozó de una tranquilidad para practicar varios deportes, entre los que se encontraban el balonmano y el hockey sobre hielo. Ya en la adolescencia se cambió al fútbol y ya no lo abandonaría nunca. Como el fútbol en Suecia era amateur, tuvo que compaginar el deporte con el trabajo. Trabajaría de electricista, trabajo que definía a la perfección su regate. Empezaría su carrera (no profesional, porque como he dicho anteriormente era un fútbol amateur, pero si que su carrera mas en serio) en el Hammarby en 1946. Como había un jugador que se llamaba igual, a Lennart Skoglund le llamaron "Nacka", porque es un barrio de la ciudad de Estocolmo. El apodo "Nacka" no lo abandonaría jamás. En el conjunto de Estocolmo jugaría tres temporadas, para marcharse en 1949 al AIK Solna. Allí jugaría unos partidos, en los que lo haría tan bien, que sería convocado para la selección de Suecia, que iba a disputar el Mundial de 1950. Gracias a su buena actuación en dicho torneo, llamaría la atención de los equipos brasileños, debido a que la Copa del Mundo se celebraba en el país carioca, pero las negociaciones no fructificaron. Mucho mejor para "Nacka", ya que le llegó una genial oferta del Inter de Milán, para dejar el fútbol amateur, convertirse en futbolista profesional y dedicarse enteramente al balompie. Ficharía por el conjunto interista, tras el Mundial de 1950 celebrado en verano.
En Milán viviría los mejores años de su carrera deportiva. Jugaría nueve temporadas, en las que se convertiría en una leyenda del conjunto neroazzurro. Se convirtió rápidamente en la gran estrella del equipo, con el que conseguiría alzarse con los Scudettos de 1953 y 1954. Su carrera en el Inter tuvo sus altibajos, por culpa de sus salidas nocturnas y su alcoholismo. Pero para 1958 renació y volvió a ser el mismo. Además ayudó que para el Mundial de 1958, la federación sueca quitara la prohibición a los futbolistas que se iban al extranjero a jugar y abandonaban el amateurismo. Con lo cual Skoglund estaba eufórico, con volver a ser convocado en la selección sueca y jugar otro Mundial, así que tenía que darlo todo con el Inter, para que todo el mundo olvidara sus problemas extradeportivos.
Angelo Moratti, sabedor de que el sueco iniciaba su cuesta abajo y tenían a un chaval llamado Mario Corso como sustituto, traspasó a Skoglund a la Sampdoria en 1959. En el conjunto genovés jugaría tres buenas temporadas y se marcharía en 1962 al Palermo. En el conjunto siciliano, ya con 33 años y con el cuerpo muy castigado por el alcoholismo, no jugaría casi nada, por lo que decidió volver al fútbol amateur de su país, para fichar por el equipo donde inició su carrera, el Hammarby en 1963. En Estocolmo jugaría tres temporadas y pondría punto final a su brillante carrera en 1967, a la edad de 37 años.
Con la selección sueca jugaría el Mundial de 1950, en el que quedarían terceros. Este equipo era un combinado de futbolistas amateurs, en el que destacaban el "Gre-No-Li", es decir, Gunnar Gren, Gunnar Nordhal y Nils Liedholm, mas el joven Skoglund. Se perdería el Mundial de 1954, por la prohibición de la federación sueca, en la que impedía la participación en la selección nacional, a los futbolistas que jugaran en el extranjero. Su último torneo sería el Mundial de 1958, con la prohibición eliminada, en la que ya no estaba Nordhal, pero quedaban Gren y Liedholm, mas la joven estrella Kurt Hamrin. En dicho torneo celebrado en Suecia, cuajarían una sensacional actuación, quedando segundos, tras perder en la final contra la magnífica Brasil de Pelé, Garrincha (con el que comparte casi la misma historia), Didí, Zagallo, Vavá, Djalma Santos y demás.
En Milán viviría los mejores años de su carrera deportiva. Jugaría nueve temporadas, en las que se convertiría en una leyenda del conjunto neroazzurro. Se convirtió rápidamente en la gran estrella del equipo, con el que conseguiría alzarse con los Scudettos de 1953 y 1954. Su carrera en el Inter tuvo sus altibajos, por culpa de sus salidas nocturnas y su alcoholismo. Pero para 1958 renació y volvió a ser el mismo. Además ayudó que para el Mundial de 1958, la federación sueca quitara la prohibición a los futbolistas que se iban al extranjero a jugar y abandonaban el amateurismo. Con lo cual Skoglund estaba eufórico, con volver a ser convocado en la selección sueca y jugar otro Mundial, así que tenía que darlo todo con el Inter, para que todo el mundo olvidara sus problemas extradeportivos.
Angelo Moratti, sabedor de que el sueco iniciaba su cuesta abajo y tenían a un chaval llamado Mario Corso como sustituto, traspasó a Skoglund a la Sampdoria en 1959. En el conjunto genovés jugaría tres buenas temporadas y se marcharía en 1962 al Palermo. En el conjunto siciliano, ya con 33 años y con el cuerpo muy castigado por el alcoholismo, no jugaría casi nada, por lo que decidió volver al fútbol amateur de su país, para fichar por el equipo donde inició su carrera, el Hammarby en 1963. En Estocolmo jugaría tres temporadas y pondría punto final a su brillante carrera en 1967, a la edad de 37 años.
Con la selección sueca jugaría el Mundial de 1950, en el que quedarían terceros. Este equipo era un combinado de futbolistas amateurs, en el que destacaban el "Gre-No-Li", es decir, Gunnar Gren, Gunnar Nordhal y Nils Liedholm, mas el joven Skoglund. Se perdería el Mundial de 1954, por la prohibición de la federación sueca, en la que impedía la participación en la selección nacional, a los futbolistas que jugaran en el extranjero. Su último torneo sería el Mundial de 1958, con la prohibición eliminada, en la que ya no estaba Nordhal, pero quedaban Gren y Liedholm, mas la joven estrella Kurt Hamrin. En dicho torneo celebrado en Suecia, cuajarían una sensacional actuación, quedando segundos, tras perder en la final contra la magnífica Brasil de Pelé, Garrincha (con el que comparte casi la misma historia), Didí, Zagallo, Vavá, Djalma Santos y demás.
Saludando al rey Gustavo V1 de Suecia.
Al lado de Kurt Hamrin.
Con la maravillosa selección sueca del 58, entre los
que estaban y se ven en la foto, Gren, Liedholm y Hamrin.
Para ganar un dinero extra en su etapa de futbolista, ya que lo derrochaba todo, abrió un bar con su mujer, pero al final entró en bancarrota y lo cerró. Después de esto, grabó un disco en el que cantaba él mismo, para sacarse un dinero con el que solventar, todo lo que su estilo de vida estaba destrozando.
Si en su etapa de futbolista tuvo serios problemas de adicción al alcohol, estos se encrudecieron cuando se retiró del fútbol, por culpa de haber derrochado su dinero, que le hicieron tener serios problemas económicos. Además su mujer, una modelo italiana a la que había conocido en su periplo en el Inter, se había divorciado al no soportar su estilo de vida y sus graves problemas de alcoholismo, que le habían llevado a tener altercados durante sus borracheras y a perder la licencia de conducir, tras varias veces borracho conduciendo. Tras varios años malviviendo, en los que vivía solo en un apartamento de Estocolmo, con la compañía diaria de una botella de whisky, viendo que su vida no iba hacia ningún lado, sabiendo que sus hijos preferían lógicamente a su madre y se quedaron en Milán, se suicidó un 8 de julio de 1975, con tan sólo 45 años de edad. Si que tenía una persona, que era su único apoyo en la vida, su madre, pero no le resultó suficiente, ya que se dio cuenta de que había hecho mucho daño a la gente y ya no podía cambiar porque tenía una enfermedad, optando como se suele decir, por el camino fácil, el de quitarse de en medio.
Como homenaje, le hicieron esta estatua justo al lado de su apartamento.
Una triste historia y vida la de "Nacka". Y eso que nació un 24 de Diciembre. No todo es bonito en las Navidades.
No hay comentarios:
Publicar un comentario