Les voy a hablar de un futbolista, que se desenvolvía igual de bien en el césped que en las pasarelas, Iván Helguera.
Helguera fue un futbolista español de los años 90 y de la primera década de este siglo. Podía jugar indistintamente de defensa central o mediocentro organizador, aunque la realidad es que por sus características era un líbero, pero ya sabemos que se dejó de jugar con líbero en el fútbol. Tenía una clase sublime sacando el balón jugado, También tenía una grandísima visión de juego, con la que daba fenomenales asistencias y balones en largo. En defensa era elegante, anticipándose al contrario, ya que era lento y si era superado en velocidad, estaba perdido. Muy inteligente tácticamente, eligiendo siempre la mejor opción para subir al ataque o quedarse en la defensa. En el juego aéreo era igual de bueno, tanto en ataque como en defensa. Y tenía un gran carácter, que le hacía liderar al equipo desde atrás, pero también se enzarzaba en discusiones con los contrarios y protestaba mucho a los árbitros. Un fenomenal jugador que no tuvo la continuidad que se esperaba en un jugador de su talento y jerarquía. Y te queda la sensación, de que podía haber sido una leyenda española, pero la realidad es que no lo fue.
Tiene una afición que le gusta tanto como el fútbol, su pasión por la moda. Hacía muchos trabajos como modelo fotográfico. Pero no sólo se dedicaba a posar en las fotos, sino que vestía con mucha elegancia y con ropas de las grandes marcas de la moda, Armani, Versace, Dolce Gabbana... Lo suyo era una obsesión. Digamos que es bastante pijín, no por su forma de vestir elegante (que me parece muy bien que los futbolistas vistan elegante y no como hoy en día), sino por su forma de ser. Y es muy habitual verle en las tiendas de ropa de marca y en las pasarelas de moda, junto a su mujer. En su etapa de jugador, representaba a la perfección el estilo metrosexual, junto a otros como Guti y Beckham.
¿Como os quedáis después de este vídeo? La tontería que tiene es alarmante. Esta es la definición clara de la palabra pijo.
Pasemos a hablar de la carrera de Iván Helguera. Es nacido en Santander (Cantabria), así que jugaría en las categorías inferiores del Racing. Pero no contarían con él y se tendría que marchar de su Cantabria natal, para buscarse la vida en Castilla La Mancha. Jugaría en el Manchego, un modestísimo equipo de Ciudad Real, en 1996. Su buen rendimiento allí, hizo que el Albacete lo fichara en enero de 1997. Allí jugaría hasta junio a buen nivel. Increíblemente llamaría la atención de Italia, fichando por la Roma en el verano de 1997. Es como se suele decir, un fichaje muy bizarro, ya que es muy extraño que un grande de Italia, se fije en un equipo como el Albacete. Y no porque tenga nada en contra del Albacete, sino porque en aquella época estaba en la Segunda División. En el conjunto romano obviamente se pegaría el estacazo, debido a que era muy joven, sin ninguna experiencia en primera división y menos en un grande. Pero el chaval tenía muchísimo talento y era una gran promesa del fútbol español, así que se marcharía cedido al Espanyol en 1998, para seguir su progresión de una manera mas lógica. En el conjunto perico jugaría una maravillosa temporada, llamando la atención del Real Madrid. Pero como estaba cedido por la Roma, el Espanyol haría efectiva la opción de compra y se lo vendería al Real Madrid en 1999, con los consiguientes beneficios del traspaso para el conjunto de Barcelona.
En el conjunto blanco jugaría ocho temporadas, en las que iría de mas a menos. Sus primeras temporadas daría lecciones de juego, con las características que he mencionado anteriormente, siendo uno de los mejores jugadores del equipo. Pero ya en los últimos años en el conjunto merengue, se desconcentró mentalmente, cometiendo muchísimos errores defensivos, que le costarían su marcha de la capital española. Ganaría la Liga de Campeones del 2000, derrotando en la final al Valencia. Ese equipo que tan bien recogió Del Bosque, tras el despido de Toshack, estaba formado por Casillas, Salgado, Roberto Carlos, Hierro, Redondo, Savio, Guti, McManaman, Morientes, Raúl, Karanka, Anelka e Iván Campo. Al año siguiente el presidente Lorenzo Sanz, perdería las elecciones a la presidencia del Real Madrid, dando entrada a Florentino Pérez y la era de los galácticos. Se marcharían Redondo y Anelka y llegarían Figo y Makelele, con los que ganarían la Liga de 2001. Al año siguiente, otro galáctico mas y otro título mas. Ficharon a Zidane y ganaron la Liga de Campeones de 2002, en la que derrotarían en la final al Bayer Leverkusen. En 2003, ficharon a otra megaestrella, Ronaldo, con quien conseguirían la Liga. En 2004 todo cambiaría, ya que a Florentino Pérez se le ocurrió la brillante idea, de despedir a Del Bosque, porque no daba el perfil de imagen que quería el magnate de la construcción. Contrató en su lugar a Carlos Queiroz, que fue un despropósito. Vendrían malos años para el conjunto blanco. No sería hasta la llegada de Capello, cuando volverían a ganar títulos. Ganarían la Liga de 2007, con un equipo totalmente nuevo. La era de los galácticos había terminado y ahora había un equipo de currantes. Ahora estaban Sergio Ramos, Cannavaro, Diarra, Emerson, Van Nistelrooy y Robinho. Ese año fue extraño para Helguera, ya que no contaba para Capello y fue declarado transferible, pero por varias lesiones acabó jugando y se hizo con el puesto de titular.
Tras los fichajes de Pepe y Metzelder, se tuvo que marchar del Bernabéu. Fichó por el Valencia en 2007, tras recibir la carta de libertad del Real Madrid. Lo que se suponía que iba a ser el sitio ideal, para que Helguera volviera por sus fueros, se convirtió en un infierno. Le costó hacerse con el puesto de titular, ya que también estaban en su mismo puesto, Albiol y Marchena. Si a eso unimos que la temporada en el conjunto ché fue muy convulsa, ya que despidieron al técnico Quique Sánchez Flores, para dar lugar a Koeman, que destrozó al equipo con sus decisiones dictatoriales a mitad de temporada. Helguera aguantó la embestida de Tintín y conseguiría alzarse con la Copa del Rey de 2008. Pero tras la llegada al año siguiente del técnico Emery, llegaría el fin del cántabro en el conjunto de la capital del Turia. Emery no contaba con Helguera y al final tuvieron muchos rifi rafes entre ellos, que dieron con el despido de Helguera en diciembre. Tras no encontrar un equipo que le convenciera, decidió retirarse del fútbol en 2009, a la edad de 34 años.
Con la selección española jugó la Eurocopa del 2000, donde se eliminarían en cuartos de final ante Francia, que a la postre sería la ganadora del torneo. El Mundial de 2002, donde llegarían a los cuartos de final, donde tras el robo del árbitro egipcio, caerían ante Corea del Sur. El mismo Helguera, sino le llegan a sujetar, hubiera pegado al árbitro de la impotencia. Y su último torneo sería la Eurocopa de 2004, en la que caerían en primera fase, tras estar encuadrada con los dos finalistas del torneo, Portugal y la sorprendente campeona Grecia.
Iván Helguera, un jugador sensacional, que iba camino de convertirse en leyenda, pero al final no llegó a tanto. Y puede ser por la tontería de pijerío que tenía encima, pero la realidad es que se tomaba muy en serio el fútbol cuando jugaba. Nunca sabremos el porqué no perduró mas años, al nivel de estrella. Nos quedaremos en como ejercía a la perfección, el papel de líbero.
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