Les voy a hablar de uno de los futbolistas mas sucios de toda la historia del fútbol, Roy Keane.
Los irlandeses siempre han tenido fama de borrachos y por culpa del alcohol, se ponían violentos y se liaban a mamporros. Bueno, no se si antiguamente fuera verdad, pero los irlandeses ya no son así, sino todo lo contrario. Pero Roy Keane, se empeña en seguir con ese famoso estereotipo.
Roy Keane fue un futbolista irlandés, de los años 90 y la primera década de este siglo. Jugaba como centrocampista, actuando como mediocentro defensivo. Era muy fuerte y no rehuía jamás el cuerpo a cuerpo. Era perfecto en el trabajo defensivo, colocándose perfectamente en el campo, para estar siempre encima del contrario y robarle el balón. Además tenía mucha potencia física y si el contrario lograba sobrepasarlo, podía ir detrás de él y quitarle el balón. Era incansable, todo un pulmón en el centro del campo. Además era muy inteligente tácticamente, ya que guardaba la posición de sus compañeros que se iban al ataque o si la ocasión lo merecía, se incorporaba al ataque sin ningún problema, creando peligro con su gran disparo lejano o llegando desde segunda línea y sorprendiendo a las defensas rivales. Metía muchos goles de esta manera y pese a ser diestro, no sólo los metía con la derecha, sino que con la zurda y hasta de cabeza. Encima movía el balón con muy buen criterio, siendo el primer encargado de salir jugando desde atrás, dando pases en corto o en largo bastante decentes, aunque no fuera su punto fuerte. Todo un jugadorazo, que era el absoluto jefe de su equipo, siendo la voz del entrenador en el campo, diciéndole a cada uno lo que tiene que hacer en cada jugada. Por eso llegaría a ser capitán, tanto del Manchester United, como de la selección irlandesa.
Hasta aquí lo positivo de este jugador, ahora vamos con lo negativo. Buscaba siempre la expulsión del rival, provocándole constantemente. Se enzarzaba siempre en broncas con los contrarios, amenazándolos o agrediéndolos. Y hacía unas entradas criminales, buscando siempre lesionar a su rival, con patadas durísimas, clavando los tacos en cualquier parte del cuerpo de su "enemigo" o soltando los codos para golpear la cara del contrario. Y es que para Keane, el fútbol era una guerra y no perdía la ocasión de declarar la guerra a su rival y lanzar un ataque en cuestión de segundos. Tuvo broncas con cientos de jugadores, no sólo con los rivales, sino con los propios compañeros, como Heinze y Schmeichel, con los que intercambiaron insultos y casi llegan a las manos. Muy sonados eran sus duelos con Patrick Vieira, en los que saltaban chispas. O cuando lesionó a propósito y de por vida a Alf-Inge Haaland, no arrepintiéndose de lo que había hecho, justificándose al decir que lo había hecho porque el noruego le lesionó anteriormente en un partido y encima le dijo que no hiciera teatro, así que se tomó su venganza. Y las constantes declaraciones incendiarias, en las que criticaba a diestro y siniestro, aunque fueran compañeros o entrenadores.
Aquí todas las "joyitas" que nos dejó Keane en su carrera
Roy Keane empezó su carrera en su país, en el Bobh Ramblers en 1989. En el conjunto irlandés jugaría una temporada, en la que llamaría la atención de la First Division inglesa. Ficharía por el Nottingham Forest en 1990. En la ciudad de Robin Hood jugaría tres buenas temporadas, en un equipo entrenado "todavía" por el mítico Brian Clough y con jugadores como Stuart Pearce, Sheringham y el propio Keane, que pasaría de la zona media, al descenso en su tercera etapa. Precisamente tras ese descenso, Roy Keane fichó por el Manchester United en 1993, convirtiéndose en el fichaje mas caro del Reino Unido, por aquella época.
En los Red Devils haría historia al jugar doce temporadas, las mejores de su vida, tanto en lo individual como en lo colectivo. En toda su estancia en Manchester sería entrenado por Alex Ferguson. En su primera temporada ganaría la Premier League de 1994 y la FA Cup del mismo año, con jugadores de la talla de Schmeichel, Irwin, Ince, Kanchelskis, Giggs, Hughes y Cantona. Para la temporada 1995-1996 se haría una revolución en el conjunto mancuniano, saliendo gente como Ince, Kanchelskis y Hughes y fichando a Andy Cole, pero sobre todo confiando en un grupo de jóvenes promesas salidas desde la cantera, que la llamarían "Fergie Babes". Esos jugadores eran los hermanos Neville, Beckham, Butt y Scholes. Con ellos ganarían la Premier League de 1996 y la FA Cup del mismo año. Para la siguiente campaña se retiraría Bruce y en su lugar traerían a Johnsen, mas Solksjaer y Poborsky, pero este último tendría un paso fugaz por los diablos rojos, ya que apenas jugaría. Con ellos revalidarían el título de Premier League de 1997.
En la siguiente temporada Cantona se retiraría del fútbol, dejando la capitanía en manos de Roy Keane, un tipo igual o mas polémico que el francés. Ficharían a Sheringham como sustituto de "The King", mas Berg para el centro de la zaga. Esta campaña fue nefasta para Roy Keane, ya que tendría lugar la patada de Haland, que le dejaría "KO" para el resto de la temporada. Ya en el curso 1998-1999, con Keane recuperado y los fichajes de gente muy importante, como Stam y Yorke, ganarían la Premier League de 1999 y la FA Cup del mismo año. Pero sobre todo conseguirían algo que llevaban 31 años esperando. Se alzarían con la Liga de Campeones de 1999, al conseguir un milagro que consistía en meter dos goles en el tiempo de descuento, cuando el Bayern Munich iba ganando por 1. Tras el triplete conseguido, se marcharía Schmeichel por sorpresa al Manchester City, algo que no sentaría nada bien en el United. En su lugar llegaría Bosnich, que dejó un penoso recuerdo al ser suspendido por cocaína y el central francés Silvestre. Con ellos ganarían la Premier League del 2000. En la campaña siguiente vendría Barthez, para sustituir a Bosnich y Wes Brown que sustituiría a Stam, que se había marchado a la Lazio, tras acabar mal con Ferguson. Esto coincidiría con el ostracismo al que fueron sometidos dos de sus estrellas, los delanteros Cole y Yorke, en beneplácito del veterano y cumplidor Sheringham. Con ellos se alzarían con la Premier League de 2001.
Para el curso 2002-2003 cambiaría bastante el conjunto mancuniano, al contar con gente nueva de la talla de Van Nistelrooy, Verón, Laurent Blanc y Forlán. Con todos estos conseguirían la Premier League de 2003. Para la siguiente campaña se marcharían Verón, Barthez y Blanc y llegarían Tim Howard y Cristiano Ronaldo, con los que ganarían la FA Cup de 2004. Tras una lesión que le impediría jugar en muchos partidos, a parte de lastrarle y dejarle prácticamente retirado del fútbol, unido a discrepancias con Alex Ferguson en su último año, hicieron que saliera del club por la puerta de atrás, marchándose a Escocia, para fichar por el Celtic (del que era fan) en 2005. En el conjunto católico de Glasgow casi ni jugaría, optando por la retirada del fútbol en 2006, con 34 años de edad.
Con la selección de la República de Irlanda jugaría el Mundial de 1994, en el que los de Eire llegarían a los octavos de final, siendo eliminados por los Países Bajos, de Koeman, los hermanos de Boer, Rijkaard, Blind, Witschge, Wouters, Jonk, Winter, Overmars y Bergkamp. Irlanda no se volvería a clasificar para un torneo de selecciones, hasta el Mundial de 2002, en el que iría convocado Keane, pero no llegaría a jugar ningún partido. Y no jugó ningún partido, porque con el seleccionador irlandés Mick McCarthy, tuvo sus mas y sus menos por una carta que publicó Keane, en la que criticaba duramente al seleccionador irlandés. Este le recriminó esta acción y acabaron tan mal, que le expulsó de la selección y le dijo que mientras el fuera entrenador de Eire, jamás volvería a vestir la camiseta de la República de Irlanda.
Roy Keane fue un grandísimo jugador, uno de los mejores jugadores de la historia de Irlanda y uno de los mejores capitanes que ha tenido el Manchester United. Pero como persona es un auténtico impresentable.
Con la selección de la República de Irlanda jugaría el Mundial de 1994, en el que los de Eire llegarían a los octavos de final, siendo eliminados por los Países Bajos, de Koeman, los hermanos de Boer, Rijkaard, Blind, Witschge, Wouters, Jonk, Winter, Overmars y Bergkamp. Irlanda no se volvería a clasificar para un torneo de selecciones, hasta el Mundial de 2002, en el que iría convocado Keane, pero no llegaría a jugar ningún partido. Y no jugó ningún partido, porque con el seleccionador irlandés Mick McCarthy, tuvo sus mas y sus menos por una carta que publicó Keane, en la que criticaba duramente al seleccionador irlandés. Este le recriminó esta acción y acabaron tan mal, que le expulsó de la selección y le dijo que mientras el fuera entrenador de Eire, jamás volvería a vestir la camiseta de la República de Irlanda.
Roy Keane fue un grandísimo jugador, uno de los mejores jugadores de la historia de Irlanda y uno de los mejores capitanes que ha tenido el Manchester United. Pero como persona es un auténtico impresentable.
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